En la fría y brumosa mañana de Puerto Montt nos repartimos para las visitas, las mujeres se fueron de shopping y nosotros salimos para Angelmon, un mercado de frutos del mar donde se vende la increíble variedad que los pescadores extraen de las riquísimas aguas del sur chileno. Merluza, pez sierra, ostras, ostiones, y una lista interminable. En la planta alta del mercado, pequeños restaurantes preparan pescados, mariscos y el tradicional "curanto", un puchero con productos del mar, mas todos los conocidos por nosotros.
Este 15 de Abril, como inicio de la temporada de pesca, el lugar era visitado por el ministro de salud de chile, estaba todo super prolijo y ordenado, daba gusto.
Con mas de 2300 km por delante, iniciamos el viaje de regreso a las 12.30, con la esperanza de llegar a Santa Rosa antes de la media noche. El retorno por la ruta 5 al norte, luego de que se se levanta la niebla, nos regala hermosas vistas del volcán Ozorno. El calculo de combustible para pasar la cordillera fue tan exacto, que llegamos a la primer estación de servicio del lado argentino solo con el olor a nafta. Y todo para ahorrar el 25 %, ya que en Chile es mas caro.
En villa La Angostura compramos una exquisitas empanadas recién horneadas y en viaje tranquilo llegamos a Neuquen a las 22.00, por lo que resolvimos pasar aquí la noche y no arriesgar el cruce del desierto de madrugada y cansados. La pena es que los hoteles estaban llenos por el publico que asiste a ver la carrera del TC 2000 que este fin de semana se lleva a cabo en Neuquen. Al final conseguimos lugar el el hotel El Prado, las camas son enormes y muy cómodas, al otro día comprobamos que también tiene un excelente desayuno continental.
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